La facilidad con la que gente ajena decide sobre la vida o la muerte del resto del mundo es pasmosa. Hoy por hoy es la esterilización, que en realidad ya es bastante impactante, pero quien sabe lo que controlarán el día de mañana como las cosas se desarrollen así.
Con esto no estoy intentando que nadie se revolucione ni nada por el estilo, solo creo conveniente que la gente sepa exactamente en qué mundo vivimos y a qué se dedican y qué apoyan los peces gordos del mundo.
Con el fin de controlar la natalidad, el dictador de Uzbekistán está forzando a los médicos a extirparle el útero a las mujeres, sin su aprobación ni su conocimiento.
Islam Karimov es uno de los muchos dictadores del mundo. Ha llegado incluso a cocinar vivos a activistas de la oposición. Sin embargo, su régimen está respaldado con millones de dólares del gobierno de EE.UU., quien obtiene a cambio transporte de militares a través de Uzbekistán. Esta última ola de brutalidad contra las mujeres ha atraído la atención internacional sobre este monstruo. Usemos este trágico momento para persuadir a su mayor aliado, EE.UU., para que le de la espalda.
La Secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, puede imponer nuevas sanciones militares y lograr que EE.UU. y otros gobiernos le retiren todo apoyo. Defensora de los derechos de la mujer, Clinton ya ha condenado públicamente a Karimov, y con esta última ofensiva contra las mujeres, aumentan las posibilidades de que se logre un cambio.
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